Al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y a la Comisión Europea.
Igualdad Animal ha investigado el sacrificio de caballos en Navarra (España) -así como en Italia y México- encontrando que los animales eran a menudo matados estando conscientes y causándoles un sufrimiento innecesario e injustificable.
Cada año se matan más de 30.000 caballos en los mataderos españoles. Además, otros miles son confinados en camiones y transportados largas distancias para ser matados en Italia, Suiza, Holanda, Bélgica o Francia. Se les obliga a pasar horas de pie en camiones abarrotados, sufriendo lesiones, desarrollando a menudo fiebre de embarque (una enfermedad respiratoria asociada al transporte de larga distancia), pérdida de peso, fatiga y deshidratación.
Según el estudio Welfare and health of horses transported for slaughter within the European Union (Bienestar y salud de los caballos transportados para el sacrificio dentro de la Unión Europea) realizado en 2011 por veterinarios de las universidades de Cambridge, Anglia Ruskin y Glasgow, el 37% de los caballos examinados tras su llegada se consideraron no aptos para el transporte de acuerdo con el Reglamento (CE) nº 1/2005 del Consejo y ninguno de los envíos cumplía tanto con el vehículo como con la salud del animal, con una media de 6 caballos por envío con lesiones agudas. La conclusión del estudio corrobora lo que Igualdad Animal ha presenciado: "Este estudio ha identificado evidencias de un pobre bienestar en los caballos que son transportados largas distancias al matadero, incluyendo cojeras y lesiones graves, y un alto nivel de incumplimiento del Reglamento (CE) nº 1/2005 del Consejo sobre la protección de los animales durante el transporte."
Al igual que los perros y gatos con los que muchos de nosotros convivimos, los caballos son seres sensibles que merecen protección. Su transporte a través de países y su sacrificio son crueles e incompatibles con el respeto que merecen.
En 2020 Grecia prohibió el sacrificio de caballos, incluyéndolos junto a perros y gatos en la prohibición de criarlos, utilizarlos y exportarlos para la producción de pieles, cuero, carne u otras sustancias.
Ha llegado el momento de que el Gobierno español y la Comisión Europea cumplan con su deber de proteger a estos animales y pongan fin a su maltrato.
Por todo ello, me sumo a la petición de Igualdad Animal para que se ponga fin a la exportación y sacrificio de caballos y otros equinos para el consumo humano.
Atentamente,