

Los superpoderes y las fascinantes personalidades de los cerdos
Probablemente, mientras leas este artículo, descubrirás muchas similitudes entre los cerdos y los humanos. Son sorprendentemente parecidos a nosotros. Sienten dolor y alegría y, en libertad, viven en grupos familiares en los que cada cerdo tiene un carácter único. Existen, por ejemplo, cerdos solitarios y gruñones, mediadores amantes de la armonía y valientes aventureros.
Los cerdos crean vínculos estrechos y pasan la mayor parte del tiempo con sus compañeros favoritos –o con su humano favorito–. Porque sí, los cerdos también pueden formar lazos muy fuertes con las personas, al igual que los perros.
Las cerdas son madres cariñosas y se ocupan con esmero de sus crías
Antes de dar a luz, las cerdas construyen un nido cálido y acogedor. Incluso se ha observado a otros cerdos ayudando a las futuras madres con el nido y acompañándolas durante el parto, como si fueran comadronas.
Mientras los lechones maman, sus madres les “cantan”. Las tías también participan en la crianza: los lechones aprenden observando a sus mayores, por ejemplo, a cómo superar obstáculos o resolver problemas. Se ha documentado cómo algunos abren mecanismos con el hocico para acceder a comida. Los mayores lo hacen primero, y los pequeños imitan. Curiosamente, también les ayuda dormir una noche para procesar y consolidar lo aprendido.

Luego están los cerdos particularmente inteligentes y astutos…
Dentro de cada grupo familiar también hay cerdos especialmente inteligentes y algo astutos. Aprenden rápido, por ejemplo, a encontrar la mejor comida. Si descubren una buena fuente de alimento, a veces intentan esconderla del resto de su grupo. Si otro cerdo se acerca sin saber lo que hay, el primero actúa con disimulo o incluso lo distrae. Y cuando se queda solo, aprovecha para darse el festín. Aunque esto suene algo egoísta, los cerdos suelen ser animales muy cooperativos.
Los pacificadores del grupo: cerdos que median conflictos
Algunos cerdos son especialmente pacíficos y buscan la armonía. Si hay una pelea, intervienen para calmar los ánimos. También se ayudan mutuamente: se ha observado a varios cerdos abrir una puerta con el hocico para que un compañero aislado pudiera reunirse de nuevo con el grupo.
Cerditos perezosos y adorables que aman su siesta
Hay cerdos que son verdaderos amantes del descanso y los mimos. Les encanta acurrucarse en su nido y dormir junto a sus mejores amigos, a menudo panza con panza. Mientras sueñan, mueven las patas o emiten suaves gruñidos.

También están los curiosos aventureros
Los cerdos disfrutan jugando, peleando por diversión y corriendo a toda velocidad, llegando a alcanzar hasta 20 km/h. Incluso se ha visto a algunos bailar: al sonar música alegre, los cerdos juguetean y menean el rabo con entusiasmo. De hecho, un estudio demostró que los cerdos reaccionan con diferentes emociones según la música que escuchan.
Como ves, los cerdos se parecen mucho a nosotros. Sin embargo, en la industria ganadera viven en condiciones de sufrimiento inimaginable. No pueden desarrollar sus necesidades ni su personalidad. Están atrapados en un sistema cruel.
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¿Sabías que los cerdos expresan sus emociones a través de los gruñidos?
Los científicos han identificado más de 20 sonidos diferentes. Ladran, chillan y ronronean. Cuando están estresados o asustados, gritan con tonos muy agudos. Si están frustrados, gruñen. En estados de relajación o felicidad, sus sonidos son más graves, como un ladrido. Las madres utilizan estos sonidos para avisar a sus crías de que es hora de mamar. Y cada cerda tiene su propio tono y ritmo.
Los cerdos tienen una gran inteligencia y memoria a largo plazo
Se ha comprobado que son capaces de encontrar soluciones creativas para conseguir comida escondida, demostrando una asombrosa perseverancia y habilidad. Pero su inteligencia no se limita a la comida: pueden distinguir entre rostros y nucas humanas. Además, aprenden a manejar un joystick con el hocico para mover un cursor en una pantalla. También pueden aprender muchos trucos, como traer objetos cuando se les llama. Incluso se han observado cerdos usando herramientas, como un trozo de corteza para escarbar. Más impresionante aún: en Filipinas, cerdos salvajes empujan piedras contra las vallas para comprobar si hay electricidad. Y lo que aprenden, no lo olvidan fácilmente.
Su percepción es extraordinaria
Pueden distinguir cantidades y tamaños, una habilidad poco común entre los animales. Comprenden el funcionamiento de los espejos: si se esconde comida visible sólo en el reflejo, los cerdos descubren dónde está y van directamente hacia ella, no hacia el espejo. Esto demuestra que tienen una capacidad espacial notable.
Tienen un olfato muy desarrollado. El hocico es su herramienta principal, y lo usan para comunicarse y mostrar afecto entre ellos. Contiene tantas células sensoriales como dos manos humanas juntas. Y poseen más células olfativas que los perros, lo que les permite detectar trufas o raíces enterradas a 50 cm de profundidad. En cierto modo, “ven” más con el hocico que con los ojos, que no siempre son tan buenos. De hecho, pueden tener ojos de colores diferentes, como azul, o marrón.

La limpieza es muy importante para los cerdos
Aunque muchas personas piensan lo contrario, los cerdos son animales muy limpios. En libertad suelen estar cubiertos de tierra, pero eso no significa que estén sucios. Les encantan los baños de barro, que no solo son divertidos, sino necesarios: como no pueden sudar, el barro les ayuda a regular su temperatura y protege su piel de insectos y quemaduras solares.
Hurgar en la tierra es una necesidad vital para ellos. Buscan comida en el suelo más de siete horas al día. Se ha observado a cerdos limpiando su alimento antes de comerlo. También mantienen perfectamente separados los espacios para defecar, dormir y alimentarse. Esto se debe a su hocico tan sensible: el olor de las heces y la orina les resulta extremadamente desagradable. Por eso, los suelos con ranuras de la industria porcina, donde deben estar sobre sus propios excrementos, son una fuente de estrés constante para ellos.
Estos animales fascinantes y sensibles soportan un gran sufrimiento en la ganadería industrial. Los cerdos luchan cada día por sobrevivir en el cruel engranaje de la industria cárnica.
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ALIMENTAR LA CURIOSIDAD
Los cerdos son animales muy sociables que a menudo se consideran más inteligentes que los perros. Puedes proteger a estos inteligentes animales eligiendo alternativas vegetales en tu alimentación.
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