Italia aprueba definitivamente el fin del sacrificio de pollitos macho
En la sesión del martes 2 de agosto [1], la Cámara de Diputados de Italia ha aprobado definitivamente, con un voto decisivo para la historia de las leyes de bienestar animal en el país, el cese del sacrificio de pollitos macho para finales de 2026.
La noticia llega tras la aprobación en junio en el Senado y en diciembre de 2021 en la Cámara de Diputados de la enmienda presentada por la diputada Francesca Galizia junto a Igualdad Animal que introduce, para finales de 2026, la prohibición del sacrificio selectivo de los pollitos macho, considerado un auténtico despilfarro de producción dentro de la industria del huevo. La enmienda ha sido aprobada con el apoyo de 346 diputados que han votado a favor y 10 en contra.
Igualdad Animal no puede sino celebrar este paso histórico y fundamental en Italia para la protección de los animales criados para el consumo, que llega después de un esfuerzo de campaña que comenzó en 2020. Ese año Igualdad Animal lanzó una petición firmada por más de 100.000 ciudadanos italianos para pedir al Gobierno del país y a la industria que pusieran fin a esta terrible situación, publicando imágenes exclusivas que mostraban la crueldad del sacrificio de pollitos en las incubadoras.
Gracias a este trabajo, ya en 2020 la asociación comercial de productores de huevos Assoavi se había declarado a favor de la introducción de tecnologías de sexado in-ovo capaces de evitar el sacrificio de pollitos machos, junto con el compromiso adquirido por los supermercados Coop de implantar tecnologías capaces de poner fin al sacrificio de pollitos.
La enmienda que sanciona la prohibición del sacrificio selectivo de pollos está incluida en la Ley de Delegación Europea de 2021, que ha sido aprobada definitivamente en el Congreso de los Diputados.
La propuesta había sido presentada en diciembre por Francesca Galizia, líder del grupo Movimento 5 stelle en la Comisión de Políticas de la UE, y contaba con el apoyo de muchas otras fuerzas políticas. El texto prevé plazos para actualizar los procedimientos de trabajo y la situación tecnológica de las empresas del sector de la cría de gallinas ponedoras, al tiempo que apoya la introducción y el desarrollo de tecnologías y herramientas para el sexado de embriones in-ovo capaces de identificar el sexo del pollitoantes de su desarrollo, mediante políticas de incentivación de dichas tecnologías.
En la industria del huevo los pollos macho se consideran inútiles para la producción, ya que no pueden poner huevos, ni pueden utilizarse para la carne, ya que son especies diferentes de los pollos para engorde más comunes utilizados por la industria alimentaria. Por ello, en Italia se matan cada año entre 25 y 40 millones de pollos macho.