«Para frenar el calentamiento global debemos terminar con nuestra dependencia de la carne»
La escritora y periodista Marta Zaraska ha presentado en España junto a Igualdad Animal y Plaza y Valdés ‘Enganchados a la carne; Historia y ciencia de una obsesión de 2,5 millones de años’. Una obra elegida por la revista Nature como uno de los mejores libros de divulgación científica de los últimos años.
La Organización Mundial de la Salud señaló en 2015 a la carne roja y procesada como alimentos probablemente cancerígenos para los seres humanos. Un mes después de la publicación de este informe el consumo de carne lejos de haberse reducido había aumentado. Este hecho llevó a la periodista científica Marta Zaraska a investigar cuales son las razones que nos mantienen enganchados a la carne. ¿Por qué pese a saber que puede ser un peligro para nuestra salud, para el medioambiente y que causa enorme sufrimiento a miles de millones de animales, no podemos dejarla por completo? ¿Qué nos hace anhelar las proteínas animales?
Tras años de investigación, consultar más de quinientos informes y entrevistarse con setenta científicos, Marta Zaraska logra arrojar luz sobre estas incógnitas en Enganchados a la carne. Las razones son complejas y están arraigadas en nuestra evolución, historia y cultura. Gracias a la carne nuestros ancestros fueron capaces de sobrevivir, adaptarse a los cambios del clima y poblar la tierra; en definitiva, nos ayudó a convertirnos en lo que somos.
«Marta Zaraska defiende de una forma totalmente convincente que nuestro planeta no puede sobrevivir a la creciente adicción a la carne animal». Hal Herzog, autor de Some We Love, Some We Hate, Some We Eat: Why It’s So Hard to Think Straight About Animals.
La política, por ejemplo, surge por el apego a la carne. Hoy en día este producto continúa ligado al poder, la riqueza y la masculinidad pero el tiempo que vivimos nos obliga, según la autora, a afrontar una transición alimentaria que termine con nuestra dependencia de la carne.
«La carne animal nos ha mantenido alimentados pero ya no necesitamos sus nutrientes, existen innumerables alternativas. Además, numerosos estudios muestran que el consumo de carne conlleva cáncer, diabetes y enfermedades cardíacas. Tampoco tenemos suficiente planeta para alimentar a todos los humanos con las dietas occidentales carnívoras. Si no reducimos significativamente el consumo de carne nos enfrentaremos al calentamiento global, la escasez de agua y la contaminación (…) Nos enfrentamos a una transición alimentaria»
La industria ganadera genera el 14,5% de los gases de efecto invernadero, la misma cantidad que todos los medios de transporte juntos, además de un ingente gasto de agua. Las investigaciones científicas apuntan a que sin un planeta extra no podremos sostener un futuro cárnico. Para alimentar a los cerca de 10.0000 millones de habitantes que seremos en 2050 se necesitaría producir 4,5 veces más carne. La autora apunta a la carne ‘limpia’ o ‘cultivada’ y a los productos vegetales como alternativas para afrontar la transición a dietas con menor presencia de carne.
Enganchados a la carne ha sido traducido ya a cinco idiomas; polaco, japonés, coreano, chino y recientemente al español.