¿Qué significa trabajar en un matadero?
Una de las preguntas que a menudo nos hacen es: ¿qué significa trabajar en un matadero? Y la curiosidad no termina ahí, naturalmente surgen otras preguntas como ¿quién hace este trabajo? ¿Cómo pueden resistir y permanecer indiferentes ante tanto sufrimiento?
Por eso decidimos responder contando las experiencias de quienes, de primera mano, entraron a los mataderos y vieron con sus propios ojos lo que les sucede a los animales en estos lugares.
Mauricio García Pereira, exoperario de un matadero
Hay quienes trabajan en mataderos durante años hasta que ya no soportan más.
Es el caso de Mauricio García Pereira, que trabajó durante siete años en el matadero público de Limoges, el más grande de Francia.
Después de años de presenciar la crueldad a diario, destapó junto a la organizacion L214 uno de los mayores escándalos de mataderos en la historia de Francia, y luego escribió un libro titulado “Maltrato Animal, Sufrimiento Humano” en el que cuenta su experiencia.
Durante la entrevista, Mauricio habló de muchos problemas relacionados con el trabajo en el matadero: en primer lugar, el sufrimiento de los animales que, según él, son perfectamente conscientes del destino que les espera desde el momento en que son descargados de los camiones.
Mauricio también contó cómo debido a la brutal y traumática experiencia, las personas que trabajan dentro de los mataderos consumen alcohol y drogas para olvidar lo sucedido. Él mismo abusó de las drogas mientras trabajaba en el matadero; este hábito, lamentablemente muy extendido, parece ser la única solución que los operarios de mataderos encuentran para afrontar el dolor que presencian cada día.
Una prueba más de cuánto duele este sufrimiento, en primer lugar a los animales, pero también a las personas.
Los mataderos industriales funcionan como cadenas de montaje, el objetivo es matar el mayor número de animales en el menor tiempo posible: esto significa que muchas veces la matanza se realiza sin siquiera respetar las normas mínimas para la protección de los animales, que acaban sufriendo más sufrimiento innecesario.
Las palabras de un ex empleado en el Reino Unido
La BBC News publicó una entrevista a un exoperario en Inglaterra, que quería hablar de su experiencia y del efecto que tuvo en su salud mental trabajar en un matadero.
Gracias a la experiencia de este ex empleado podemos entender lo común que es que los animales en los mataderos de todo el mundo no sean aturdidos correctamente, el testigo relata que era casi la norma que las “vacas enormes convulsionaran mientras las colgaban de la cuerda de matanza”.
En palabras de este exempleado de un matadero, se puede percibir claramente cómo la violencia y el sufrimiento están siempre presentes en el matadero, los gritos de los animales, su dolor se palpan en el aire y, para no dejarse abrumar, el único camino, explica el entrevistado, es la disociación.
Una habilidad que se aprende cuando se trabaja en un matadero es la disociación. Aprendes a volverte indiferente a la muerte y al sufrimiento. En lugar de pensar en las vacas como seres vivos “íntegros”, las dividimos en partes del cuerpo comestibles y comercializables.
Sin embargo, la disociación no puede funcionar para todos, incluso, también en en este caso, el abuso de alcohol, bebidas energéticas, drogas, eran prácticas comunes entre los trabajadores de los mataderos.
El ex empleado le dijo a la BBC que después de varios años de trabajar en el matadero comenzó a sentir tendencias suicidas y en ese momento se dio cuenta de que era hora de dejar su trabajo, y así lo hizo. Un colega con quien dice haber trabajado en la misma instalación, que se encargaba de desollar los cadáveres, se suicidó.
Sin embargo, dejar atrás la experiencia en un matadero no es tan fácil como parece decir el entrevistado.
Y por la noche, cuando cierro los ojos y trato de dormir, a veces todavía veo cientos de pares de ojos mirándome.
Nuestro trabajo para detener la crueldad en los mataderos
De todos estos testimonios se desprende claramente que el dolor y el sufrimiento son una constante en los mataderos.
En cada uno de estos lugares -como nos contaron los testigos que trabajaron allí- los animales están condenados a un sufrimiento extremo. Y estos sufrimientos se ven a menudo acentuados por las prisas impuestas por la cadena de montaje, por prácticas de aturdimiento inadecuadas y por tratos violentos o inadecuados por parte de los propios operadores.
Al año en España se sacrifican más de 900 millones de animales terrestres. Las investigaciones realizadas por Igualdad Animal durante los últimos quince años han documentado como muchos de ellos son matados estando plenamente conscientes, causándoles un sufrimiento evitable.
Todo esto no puede seguir sucediendo. Por estas razones pedimos en nuestra petición al Gobierno de España que se realicen 7 modificaciones legales:
- Eliminación de las excepciones que permiten el sacrificio de animales sin aturdir.
- Supresión de las matanzas domiciliarias.
- Eliminar el baño electrificado como medida de aturdimiento de las aves.
- Suprimir el aturdimiento de los cerdos con dióxido de carbono por el sufrimiento que les causa.
- El fin de la exportación de animales vivos a países sin garantías.
- Instalación de cámaras en los mataderos con supervisión independiente.
- Elaboración de normas que obliguen a aturdir a los peces.
La campaña ha superado las 30.000 firmas. Firma y únete a nosotros también y ayúdanos a construir un futuro mejor para los animales.
¡Firma ahora para cambiar la ley y poner fin a las prácticas más crueles en los mataderos!
PROTEGE LA INOCENCIA
La rica vida emocional de los corderos les permite entablar amistades y reconocer expresiones faciales. Protege a estos maravillosos animales eligiendo alternativas a la carne en tu alimentación.