Incontables animales fallecidos en más de 17.000 accidentes de tráfico
La Dirección General de Tráfico acaba de publicar un informe con los datos de los accidentes de tráfico registrados en 2011 en los que se vieron involucrados animales de especies diferentes a la humana. Según la DGT, fueron más de 17.000 los accidentes de estas características, siendo las comunidades de Castilla y León y Galicia las que mayor número de percances registraron. Junto con los propios seres humanos, jabalíes, corzos y perros fueron los animales que más frecuentemente estuvieron implicados en siniestros automovilísticos.
Dada la poca importancia que se confiere en nuestra actual sociedad a los individuos de especies diferentes a la humana, el número total de heridos y fallecidos en estos 17.000 accidentes no aparece registrado por la DGT; sólo tenemos información sobre las víctimas humanas, cuya cifra asciende a 10 fallecidas y 84 heridas graves. Cabe destacar que estos datos sólo hablan de colisiones en las que los vehículos implicados se vieron afectados de algún modo, por lo que los atropellos a pequeños animales en los que no se produjera ninguna alteración del tráfico no estarían contabilizados.
Gonzalo León, jefe provincial de Tráfico de Lugo, tiene muy claras las razones por las que se dan estos accidentes. Con respecto a las vías lucenses, dice: “Tenemos más de 10.500 kilómetros de vías rurales, mayoritariamente secundarias, que atraviesan zonas boscosas, con mucha fauna”. Indica que “la mejor medida es la señalización y la limpieza de los márgenes de las vías, que mejoran la visibilidad de los conductores; y en la planificación de nuevas vías, evitar que pasen por zonas de animales y rutas migratorias”.
El propio Ministerio de Fomento reconoce que una de las causas más comunes de irrupción de los animales en las carreteras se encuentra en la reducción y fragmentación de los hábitats naturales de éstos.
Más de 30 millones de animales, contabilizando sólo los vertebrados, mueren atropellados cada año en las carreteras españolas según los datos de la Sociedad para la Conservación de los Vertebrados (SCV). En la mayoría de los casos, una carretera secciona el espacio en el que dichos animales habrían de desenvolverse naturalmente, coartando por completo su movilidad.
Todos estos atropellos y accidentes suceden debido a que no se tienen en cuenta los intereses de los demás animales, con los que compartimos el planeta y que también necesitan desplazarse para buscar alimento, relacionarse o, simplemente, disfrutar de sus vidas en libertad. Continuamente trazamos nuevas carreteras y gigantescas autopistas que entran en conflicto directo con el respeto a la vida de otros individuos.
Al igual que la DGT realiza campañas de sensibilización sobre el uso del cinturón de seguridad, como forma de prevención de daños para los ocupantes de los vehículos, desde Igualdad Animal queremos hacer un llamamiento a la prevención para evitar la muerte de millones de animales de otras especies en las carreteras.
Evitar desplazamientos en la medida de lo posible, optar por transportes alternativos como la bicicleta o el transporte público, reducir la velocidad al volante y prestar atención a la carretera y sus márgenes serían algunas de las recomendaciones básicas a tener en cuenta en este sentido. Por otro lado, auxiliar a los animales atropellados y retirarlos de la calzada no sólo podrá salvar la vida de quien agoniza sobre una carretera, sino que evitará sucesivos atropellos de otros animales que se acerquen a curiosear o comer.
- Puedes leer toda una serie de consejos sobre cómo salvar vidas en la carretera aquí
Está en nuestras manos, como usuarios conscientes del problema que acarrean estas vías para millones de individuos, reclamar a los organismos competentes medidas de prevención que eviten un gran número de estos accidentes: instalación de vallados, “pasos de fauna”, pantallas de aislamiento, señalización específica, etc. Asimismo, atendiendo a la preocupación de los consumidores, las empresas fabricantes de vehículos tenderán cada vez más a incorporar sistemas de detección y prevención de obstáculos en la calzada, tecnología que podría suponer un gran avance a la hora de reducir el número de víctimas generadas en nuestros desplazamientos.