Primer juicio de la Ley “Ag-Gag” por filmar un matadero desde la vía pública
Amy Meyer, de 25 años de edad, quería ver un matadero por sí misma. Como le dijeron que nadie podía pasar dentro para ver a los animales, se dirigió al otro lado de la carretera del Dale Smith Meatpacking Company de Draper City, en Utah, para ver lo que sucedía a través de la alambrada.
Una escena en particular la hizo detenerse: «Una vaca viva que parecía estar enferma o herida estaba siendo arrastrada desde la nave por un tractor, como si se tratara de simples escombros.»
► Advertencia: imágenes de violencia contra los animales
Vídeo de The Human Society que muestra escenas similares a las captadas por Amy en Utah
Al ser testigo de esta situación, Amy cogió su teléfono móvil y grabó la escena. Cuando el administrador de matadero salió y le pidió que dejara de hacerlo, Amy respondió que estaba en la vía pública y tenía derecho a filmar. Esto mismo fue lo que dijo a la policía cuando se presentó en el lugar. Según el informe policial, el gerente afirmó que Amy invadió la propiedad y cruzó la valla de alambre de espino, a pesar de que el funcionario señaló que «no se produjeron daños a la cerca.»
Resulta curioso que el propietario del matadero que Amy Meyer filmó es Darrell H. Smith, alcalde de la ciudad. La vinculación entre los poderes públicos y las industrias de explotación animal son algo común. En Iowa, por ejemplo, la primera ley ag-gag de la nación fue patrocinada por la congresista Annette Sweeney, exdirectora de la Asociación de promoción de la ganadería “Iowa Angus”.
Este es el primer proceso que se da en EE.UU. bajo una de estas leyes, diseñadas para silenciar a los investigadores encubiertos que denuncien el maltrato animal que ocurre en las granjas. La legislación es una respuesta directa a las investigaciones que multitud de organizaciones de derechos animales han realizado en los últimos años, llevando al cierre de plantas de producción, generando una enorme indignación pública y suponiendo cargos penales contra los trabajadores por maltrato animal.
Amy Meyer se ha declarado no culpable de los cargos. Su próxima vista en la Corte será el 23 de mayo.
Nebraska, Carolina del Norte, Pennsylvania, Tennessee y Vermont están considerando proyectos de ley similares a la de Utah en estos momentos.
El Proyecto de ley de Pennsylvania criminalizará a cualquiera que "registre una imagen o sonido de una operación agrícola" o que "cargue, descargue, transfiera o envíe de otro modo" las imágenes a través de Internet.
La aprobación de este tipo de leyes supone una amenaza muy grave a la libertad de expresión de quienes denunciamos la situación de explotación que viven los animales día tras día, así como una negación del derecho a la información de la sociedad en su conjunto.