Israel prohíbe definitivamente la exportación de primates para experimentación
El ministro israelí de Protección del Medio Ambiente, Gilad Erdan, ha publicado hace apenas unas horas la decisión final tomada con respecto a la granja Mazor de cría de primates para experimentación: Mazor no podrá continuar con el cruel comercio de monos que venía realizando durante los últimos 22 años.
Por desgracia, el Fiscal General israelí ha añadido una restricción a esta decisión, permitiendo mantener el comercio de esta empresa por dos años más.
Por ello, iniciativas como “Shut Down Farm Mazor” mantendrán sus actividades hasta el cierre definitivo de la granja, con el fin de evitar el comercio y exigir la inmediata rehabilitación de los monos utilizados.
Los puntos fundamentales de esta decisión del gobierno israelí son:
1. Estricta prohibición de la importación de monos con fines de cría y posterior exportación.
2. La cría de primates se permitirá únicamente en el caso de investigación médica nacional. Según las organizaciones israelíes de defensa animal, el uso de primates en experimentación es tan bajo que la granja no podría mantener su actividad por falta de rentabilidad económica.
3. El Fiscal General ha determinado que la exportación de monos para investigación médica será legal durante los próximos dos años.
El ministro Erdan manifestaba de este modo su alegría por la resolución:
«Estoy feliz de compartir con ustedes nuestra victoria contra el comercio de monos: el Fiscal General ha respaldado mi demanda para prohibir la exportación de monos para experimentación.
Durante más de tres años he luchado por esta causa; por desgracia, también en contra de mis propios empleados del Ministerio cuando el asesor letrado afirmó que debíamos dejarlo para evitar un conflicto de libertad de comercio.
Poner fin al comercio de monos envía un mensaje claro: comerciar con animales por ánimo de lucro es inmoral y los valores éticos que guían a cualquier persona que desee reducir el sufrimiento de los animales son mucho más importantes que los económicos. Esta es una lucha fundamental por cambiar una política que ha sido costumbre en Israel desde hace años, permitiendo el comercio de animales y específicamente monos con fines de lucro.
Me gustaría dar las gracias a los miles de activistas que tomaron parte en esta lucha ya que afortunadamente este también es su éxito.»
Vídeo sobre la granja Mazor en Israel
La prohibición en la exportación de primates es una decisión histórica contra una granja que, desde que se estableciera en la década de 1990, ha sido responsable del secuestro, encarcelamiento y transporte de miles de monos para crueles experimentos en todo el mundo.
Actualmente, unos 1.500 macacos viven recluidos en las instalaciones de Mazor, de los cuales aproximadamente 900 fueron capturados de entornos salvajes.