El sufrimiento de los pollos criados para McDonalds cesa por dos meses
El proveedor de pollos de McDonalds en España ha paralizado su actividad durante los próximos dos meses. Osi Food, la empresa propietaria del matadero y las granjas que surten en exclusiva a los restaurante de la cadena, ha anunciado su cierre temporal después de que McDonalds anunciara la clausura de sus restaurantes debido a la crisis del Covid-19.
Igualdad Animal lleva más de un año denunciando las crueles prácticas que se producen en la cadena de suministro de McDonalds en todo el mundo. Dentro de la campaña internacional McCruelty- McCrueldad hemos pedido con múltiples acciones a la compañía que reconsidere sus prácticas.
La mayoría llega al matadero con tan solo 42 días de vida, cuando aún ni siquiera han alcanzado la madurez sexual, pero sí el crecimiento óptimo para las empresas. Estos animales han sido seleccionados genéticamente para crecer lo más rápido posible.
Como consecuencia de este desmesurado crecimiento sufren enfermedades metabólicas y problemas de movilidad que unido a la falta de higiene del suelo derivan en quemaduras en el pecho y en las patas. Esas heridas son las puertas de entrada de infecciones bacterianas que sufren cerca del 20% de los pollos. Viven hacinados, en un aire irrespirable y nunca ven la luz del sol.
Probablemente la demanda de pollo que satisfacía McDonalds se traslade a las superficies comerciales durante estos dos meses. Aunque es importante destacar que el consumo de carne de pollo en España lleva descendiendo desde el año 2012.
Cada vez más personas son conscientes de la realidad que sufren los pollos en las granjas, una realidad que McDonalds no muestra en sus anuncios.
Con motivo del Día Mundial Sin Carne de 2019 Igualdad Animal proyectó sobre la fachada de McDonalds’s en Madrid imágenes de la situación que sufren de los pollos explotados en las granjas.