El foie gras quedará fuera del menú tras la prohibición de importación británica
El foie gras tiene los días contados en Inglaterra. El Gobierno planea prohibir las importaciones gracias al nuevo contexto que genera el Brexit.
La producción de foie gras, que consiste en alimentar a la fuerza a patos y gansos hasta que su hígado alcanza un tamaño varias veces superior al normal, dejó de producirse en Inglaterra en 2006, tras incumplir la legislación sobre bienestar animal.
Ahora, Inglaterra va a prohibir la importación de foie gras en una medida posterior al Brexit, tras años de campañas de denuncia de Igualdad Animal y otras ONG.
A pesar de la prohibición de la producción, los comercios y restaurantes podían seguir importándolo en virtud de las normas aún vigentes desde la pertenencia del Reino Unido a la UE.
Sin embargo, los ministros están ahora dispuestos a aprovechar el Brexit para bloquear las importaciones. Varias fuentes dijeron ayer que Lord Goldsmith, Ministro de Bienestar Animal, está decidido a aplicar la prohibición “en los próximos meses”.
El mes pasado, el Ministro felicitó a Fortnum & Mason después de que la tienda de comestibles de la Reina anunciara que dejaría de tener este producto. En ese momento, Lord Goldsmith tuiteó: «El foie gras es una barbaridad insoportable. Es difícil imaginar que alguien pueda ver el proceso y seguir disfrutando comiéndolo».
El Secretario de Medio Ambiente, George Eustice, insinuó hace tres años que podría prohibirse la importación una vez que el Reino Unido hubiera abandonado por completo el mercado único de la UE. El diputado conservador Henry Smith le había instado a actuar, calificando el foie gras de «cruel de producir» y «poco saludable de comer». Anoche, un portavoz del Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales dijo que siempre había quedado claro que la producción de foie gras “suscita graves preocupaciones”.
Y añadió: «Ahora que se ha establecido nuestra futura relación con la UE, el Gobierno está estudiando otras medidas que podría tomar en relación con el foie gras».
El trabajo de Igualdad Animal denunciando la tortura del foie gras
Igualdad Animal lleva años realizando campañas denunciando el maltrato que supone la producción de foie gras. Gracias al trabajo de investigación e incidencia política, India se convirtió en el primer país del mundo en prohibir la importación de foie gras.
En los últimos años ha estado haciendo campaña en Inglaterra para reclamar la prohibición de la importación dado el nuevo contexto que generaba el Brexit.
En España, las primeras investigaciones que denunciaban la tortura de la producción de foie gras fueron realizadas por Igualdad Animal, consiguiendo repercusión internacional el escándalo sobre la granja Momotegi, que suministraba foie gras al restaurante Mugaritz. La ONG reclama al Gobierno de España la prohibición de la producción de foie gras, como ya han hecho 18 países.