Liberados los 2.500 perros del criadero de Green Hill
La Fiscalía de Brescia, ha firmado el decreto que autoriza la custodia provisional de los 2.500 perros beagles que fueron requisados el miércoles pasado al criadero de animales para la experimentación Green Hill.
Los perros se encuentran en estos momentos bajo la tutela legal de Legambiente y Lav, las asociaciones que presentaron la denuncia que llevó al precintado e incautación de los bienes del criadero el pasado miércoles. El Departamento Forestal del Estado fue responsable de la redacción de las actas de custodia de cada animal, que será entregado con su correspondiente microchip. Pese a encontrarse a salvo, los beagles continúan siendo pruebas de las actividades llevadas a acabo en el criadero, por lo que tendrán que pasar algunos días para que puedan ser adoptados.
«En este momento, las asociaciones a las que se encomendó la custodia judicial de los perros de Green Hill se están movilizando para encontrar alternativas adecuadas a las instalaciones para dar acogida a los perros», confirma el Comisario Jefe de Silvicultura de Brescia, Giuseppe Tedeschi.
La operación denominada “SOS Green Hill” supone un gran esfuerzo y despliegue de medios: el fiscal ha dado la custodia a las asociaciones, que tendrán que hacerse cargo de los perros mediante el apoyo de sus miembros, simpatizantes y resto de la ciudadanía.
Para hacer frente a esta situación de emergencia – ante la cual el Poder Judicial ha requisado también alimento para unos 60 días – y apoyar el mayor acto de justicia en términos de derechos de animales en Italia, las asociaciones tienen la intención de involucrar a todo el movimiento animalista y ecologista, reuniéndose en estos momentos en Roma el grupo de coordinación de Fermare Green Hill con Vita da Cani, el Comité Montichiari contra Green Hill y las sigas de la Federación Italiana de Derechos de los Animales y Ambiente (Enpa, Leidaa, Lega nazionale difesa del cane, Oipa).
Próximamente se informará del procedimiento a seguir para adoptar oficialmente a los animales liberados en Green Hill: cachorros de perro y gato, hembras reproductoras y perros adultos que estaban listos para empezar a ser utilizados en experimentos y que, tras su puesta en libertad, muy probablemente supongan el cierre definitivo de este criadero, al que costará recuperarse económicamente.